Aun extraño…
Tome tu mano sin titubear, rodee
tus caderas con mis brazos, Alice tu cabello entre mis dedos con un breve toque
de mis labios sobre los tuyos abrieron nuestras manos enlazándose una vez más, el
sutil toque de tu olor se mezcló junto al mío en un abrazo de inmensa paz. Tú descansaste
en mis piernas, tu corazón, cuerpo y alma se sometieron al calor inmenso de mi
cuerpo, al olor de mi entrepierna emanando tu sexualidad por mis poros,
expirando tus ganas junto a las mías para que ese momento fuera eterno. Mis manos
rodearon tus pechos, que al sentir su
calor se endurecieron para recibir mis labios sobre ellos, tus ojos se cerraron
una vez más, tu sueño se presentó como una tregua entre tu corazón y el mío. Estabas
ahí, dormida una vez más, pidiendo en sueños que ese momento no terminara nunca
más. La sensación de paz estuvo en mí, la sensación de calma me arropo. El calor
de tus senos desnudos en mis manos despertaron las ganas de devorar tu cuerpo
poco a poco, de saciarme con el líquido dulce que corre entre tus piernas, tuve
una ganas inmensas de tomarte desnuda para arroparte con el calor de mi cuerpo
junto al tuyo, Y una vez más dormir en ese sueño de inmenso descanso que solía
proporcionarme tu presencia. Sé que no podrá ser nunca más, sé que tu vida ya
no está, pero por ese breve momento fui tuyo ante esa noche cubierta de luna y
estrellas, y aun te extraño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario